viernes, 9 de octubre de 2015

El infierno de Ana Belén Montes


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Como ya hemos informado anteriormente, nuestra hermana, Ana Belén Montes se encuentra en la prisión de Carswell, un establecimiento penitenciario que forma parte de la Base Naval de Fort Worth, Texas, en la cual es el recluso número 25037-016
 
Uno de los aspectos más preocupantes es precisamente que la enviarán a esa prisión donde por lo regular envían personas con desequilibrios mentales o de extrema peligrosidad. Otro de los aspectos preocupantes, es precisamente el régimen a que se encuentra sometida, prácticamente aislada del mundo.

Buscando información sobre las condiciones y el trato a los reclusos en la cárcel de Carswell, encontré el artículo escrito por Molly Ivings, columnista del Fort Worth Star-Telegram cuyo título en español es, Los abusos en la Prisión de Carswell son reales (Abuse at Carswell Prison is for real ).

Si solamente leyéramos el primer párrafo del artículo, tendríamos suficientes elementos para juzgar lo que sucede en dicha prisión. Este párrafo plantea: ( This is a story about the Federal Medical Center Carswell, a women’s prison hospital on the outskirts of Fort Worth. It should not be read with breakfast.) Esta es una historia sobre el Centro médico Federal de Carswell, un hospital prisión de mujeres en las inmediaciones de Fort Worth. NO SE DEBE LEER MIENTRAS DESAYUNA.

En el artículo habla sobre Kathleen Rumpf, de Syracuse, New York, miembro del Movimiento de Trabajadores Católicos, de grandes concepciones políticas y que ha sido arrestada más de cien veces durante toda su vida por hacer campañas a favor de la paz y la justicia.

Al ser entrevistada para el periódico dijo:

– Yo estoy acostumbra al abuso. Yo estoy acostumbrada a las ratas y las cucarachas, yo he visto guardias que son unos bufones y otros que intentan serlo. Yo nunca he visto nada igual a la corrupción y la crueldad existente en el Hospital-Prisión de Mujeres de Carswell.

- Yo no lo hubiera creído si no lo hubiera vivido. El control que tratan de ejercer sobre la mente es sorprendente, ellos se mantienen diciendo,- Usted está recibiendo el mejor cuidado médico disponible en toda la comunidad.

El crimen que Rumpf cometió fue el protestar frente a la Escuela de las Américas en Fort Benning, Georgia. En aquella protesta la acompañaron un sacerdote de 71 años, una monja y un alfarero, Un grupo demasiado peligroso para Fort Benning.

La protesta consistió en clavar cruces en las afueras del Fuerte, llevar carteles y una foto de un cura jesuita asesinado, los letreros en los carteles planteaban BIENVENIDO A FORT BENNING. LA ESCUELA DE LAS AMERICAS ENSEÑA A TORTURAR. Otro decía LA ESCUELA QUE NOS AVERGÜENZA.

Por todo aquello, recibió una condena de dos años y cuatro meses y fue trasladada a Carswell por presentar problemas en las rodillas.

De acuerdo con lo planteado por Rumpf, en dicha cárcel se encontraban 1,195 mujeres, de las cuales 642 están en la misma por problemas médicos y psiquiátricos, aunque ella considera que el número es mayor. En la mayoría de los casos, cuando una de las reclusas solicita cuidados médicos, la frase que recibe es que -no son necesarios dichos cuidados- ,sin que un médico la examine.

Han existido casos como el de Valerie Virgil, complicada en el asalto a un banco, cuyo carro chocó y la dejó con serias quemaduras en todo el cuerpo y una pierna amputada. En todo momento le fueron negados el jabón, detergente y ropa especial que requería para que la ampollas de su piel no se infestaran, pues según los guardias- no eran necesarios dichos cuidados.

Según el criterio de Rumpf, muchas de esas negativas está fundamentadas por los guardias en que esas mujeres son unas histéricas y no se preocupan por que un médico las atienda. Ella conoció una reclusa que durante meses estuvo pidiendo le hicieran una biopsia en un seno, cuando finalmente se la hicieron le diagnosticaron estado IV de cáncer.

Otra reclusa de nombre Shirley, madre de dos niños, estuvo pidiendo ayuda durante toda la noche. El guardia le dijo que dejara de fingir, pues si continuaba fingiendo la meterían en el hueco. Shirley amaneció murta al día siguiente, en el servicio religioso que se realizó, una de sus amigas levanto la cara al cielo y preguntó¿ Estas fingiendo ahora Shirley?

Muchas otras cosas han sucedido en Carswell, continuaremos narrándolas próximamente, pero considero que con estas ya tenemos una idea clara de la situación de la cárcel donde se encuentra nuestra hermana Ana Belén.

Nestor García Iturbe

Fuente: Creators Syndicate.


http://www.tercerainformacion.es/spip.php?article92836

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